Con el desarrollo de la industria en general y el adelanto de la técnica , los Aceros inoxidables se utilizan en mayor proporción y también se multiplican las distintas composiciones para obtener materiales que mejor se adapten al uso específico que se le quiere dar. El éxito de los aceros inoxidables en la resistencia a la corrosión depende fundamentalmente de la selección de la composición adecuada y de la técnica empleada . La serie 300 del acero inoxidable es la serie más habitual de fabricación. La misma tiene aproximadamente cromo del 18% y níquel del 8%. La denominación 18-8 abarca las diferentes opciones dentro de la línea 300 . Hay poca diferencia total en resistencia a la corrosión entre los 18-8 tipos, pero las diferencias leves en la composición química hacen ciertos grados más resistentes que otros contra productos químicos o atmósferas particulares. Dichos Inoxidables son generalmente no magnéticos, y son endurecibles solamente por el funcionamiento frío.
Se refiere a la serie 300 como austeníticos la misma es una estructura cristalina formada al calentar el acero, el cromo, y el níquel a una temperatura alta donde forma las características de la serie 300 del acero inoxidable. Un "AUSTENITE" es una estructura molecular donde 8 átomos de hierro rodean un átomo de carbón, así limitando los efectos corrosivos del carbón.
Los denominados Aceros Inoxidables martensíticos son aleaciones de hierro , cromo y carbono , con pequeñas adiciones de otros elementos .En su estado ablandado presenta una estructura ferritica , la cual es transformada en martensítica con el tratamiento térmico adecuado , con el consiguiente endurecimiento y mejoramiento de sus propiedades de resistencia mecánica . Los aceros mastensíticos son magnéticos y su aplicación es recomendable para aquellos casos en los cuales el ataque corrosivo es moderado y que, al mismo tiempo, requieren resistencia mecánica, dureza y resistencia a la abrasión y a la erosión.